Responsividad
Respuesta persona-l.
“O la
respuesta es persona-l o es reaccionaria”. JLBC, Desde la vida propia, p.161.
Los seres humanos como seres por necesidad activos, viven desde sus
objetivos propios o determinados colectivamente, actuando de forma personal o
como seres de una individualidad diseñada por las circunstancias,
instituciones, cultura dominante…
Desde hace algunos años, como
casi siempre, debido al nivel extremo y
enrabiado de los renovados desmanes contrapersonalistas, la respuesta ha
empezado a aparecer pública y publicadamente
en forma de reacción. ¿Por qué
incluso la condición personal, para algunos, quizá ahora ya muchos, sólo se
hace evidente (notoriamente evidente) cuando está en trance de desaparecer?
¿Qué hace que ese “volumen” de respondones-reaccionarios no tenga la menor pre-ocupación por la <literatura>,
las personas, que no <reaccionamos> sino que mantenemos la lucha por la
vida personal en cualesquiera circunstancias?
La vida personal, la cultura de
raíz persona-lista, el <horizonte> persona-lista, es lo que se ha
ocultado, preterido, por otros elementos o adaptaciones de menor compromiso
moral, intelectual y personal a lo largo de la etapa moderna. Esta respuesta
reaccionaria en “muchos” en la actualidad no va a significar ninguna dificultad
consistente y de gran continuidad frente al <programa>
contrapersonalista.
No basta con “iniciativas”, con
muchas “iniciativas”, para afrontar el reto de la supervivencia, sólo si la
respuesta es, ahora y siempre, persona-l,
de cada persona, habrá una oportunidad para la vida personal.
Muchos “discursos”, más o menos
fundamentados, están hablando… del poco tiempo que <tenemos>. Esto ya se presentó,
hace tiempo, a esos “muchos” que ahora tienen prisa de hacer lo que nunca
pensaron, ni hicieron, NI dejaron hacer,
por ejemplo en el libro –y no sólo en este texto- Desde la vida propia. Es necesario que los
personalistas (también los personalistas de la razón vital) hagamos la
respuesta en el nivel del heroísmo, todos juntos, o lo que hagan los
reaccionarios, en la mejor de las consecuencias, sólo será una minoración
temporal de la deriva mortal contrapersonalista.
¡<Nosotros> mismos tenemos
que hacerlo, y si se está ya tan lleno de <precauciones>, entonces es que
DEBEMOS hacerlo!
¿Hay que buscar direcciones…?
Ahí tenéis una (esta no corresponde a ningún grupo, más o
menos formalizado, sino a una persona, a un personalista de la razón vital, que
no ha de ceder nunca, si no lo he hecho hasta ahora):
En esta dirección, si lo
solicitan, se enviará el libro Desde la vida propia de forma totalmente
gratuita.
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